Alivio del dolor con la terapia de luz roja (RLT)

Si padece dolor crónico, se está recuperando de una lesión o busca alivio para una dolencia como la artritis, la terapia con luz roja puede ayudarle. Esta terapia no invasiva y rejuvenecedora puede ofrecer una alternativa prometedora a los métodos tradicionales de tratamiento del dolor, como la medicación y la cirugía.

¿Cómo funciona?
La fototerapia con luz roja consiste en exponer la piel a bajas concentraciones de luz roja o casi infrarroja. A diferencia de la luz ultravioleta (UV), que puede dañar la piel, la fototerapia con luz roja penetra en ella sin causar daños.

Los efectos terapéuticos de la fototerapia con luz roja se atribuyen a su capacidad para llegar a los tejidos más profundos bajo la piel. Una vez que la luz roja es absorbida por las células, interactúa con la mitocondria, también llamada la "central energética de la célula", para aumentar la producción de trifosfato de adenosina (ATP). El ATP es esencial para la energía y la función celular. Se cree que el aumento de la producción de ATP estimula los procesos de reparación y regeneración celular para ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor.

La ciencia detrás de la fototerapia con luz roja
Reparación y crecimiento celular: la fototerapia con luz roja favorece la liberación de óxido nítrico, que puede mejorar el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno a los tejidos. Este proceso ayuda a reparar las células dañadas y favorece el crecimiento de células nuevas y sanas.

Reducir la inflamación: La inflamación crónica es una fuente común de dolor. Se ha demostrado que la fototerapia con luz roja reduce la producción de citocinas proinflamatorias y aumenta la actividad de las antiinflamatorias, lo que reduce la inflamación y el dolor.

Regeneración nerviosa: la fototerapia con luz roja puede estimular la reparación y el crecimiento de los nervios, lo que puede aliviar los dolores neuropáticos.

Recuperación muscular: los atletas y las personas que se recuperan de lesiones musculares pueden beneficiarse de la fototerapia con luz roja. Puede favorecer la recuperación muscular reduciendo la inflamación y acelerando la cicatrización.

Alivio del dolor: dolencias crónicas: Se ha investigado la eficacia de la fototerapia con luz roja en dolencias crónicas como la fibromialgia, la artrosis y la artritis reumatoide al reducir la inflamación y favorecer la reparación celular.

Dolor articular y muscular: Muchos atletas encuentran alivio a sus lesiones deportivas o por sobreuso para el dolor articular a través de sesiones regulares con la Terapia de Luz Roja.

Dolor de espalda/cuello y hombros: El dolor en la zona lumbar, el cuello o los hombros es una dolencia común y la fototerapia con luz roja puede ser una opción de tratamiento eficaz al aliviar la inflamación y estimular la reparación de los tejidos.


Recuperación postoperatoria:

Los pacientes que se recuperan de una intervención quirúrgica pueden beneficiarse de la fototerapia con luz roja, ya que puede acelerar el proceso de curación y reducir el dolor y la inflamación postoperatorios.

Terapia con luz roja
Una sesión suele durar entre 10 y 15 minutos y se puede sentir un suave calor en la piel, pero sin molestias. El número de sesiones necesarias varía en función de la afección tratada y de la respuesta individual a la terapia.


Seguridad y efectos secundarios
En general, la fototerapia con luz roja se considera segura y con efectos secundarios mínimos. Sin embargo, es esencial no mirar directamente a la luz para proteger los ojos y someterse a la terapia bajo la supervisión de un técnico cualificado.

¿Es la fototerapia con luz roja adecuada para usted?
Las sesiones constantes de fototerapia con luz roja pueden ser justo lo que necesita para aliviar el dolor. Utilizando el poder de la luz para curar y aliviar el malestar, esta terapia no invasiva puede ayudar a reducir la inflamación y promover la reparación celular, al tiempo que aumenta instantáneamente su estado de ánimo.